¡Te damos la bienvenida a mtm!
Somos una pequeña editorial independiente de Barcelona.
Nos definen los libros y juegos creativos e interactivos, materiales que te invitan
a manipular, practicar, pensar, ensuciar y a sentir emociones.
Joni Brugués fundó MTM Editores en 1998 y aunque ahora ya está jubilado,
no deja de pasarse por la oficina a ver las novedades y mimarnos un poco.
Actualmente somos un equipo bien avenido de tres y estamos encantadas
de que nos estés leyendo, permítenos presentarnos:
Alicia Izquierdo García
Alicia Izquierdo García
Llegó de la mano de Joni, que confió plenamente en ella. Editora, feminista, madre, y entregada en todo lo que hace. Es muy detallista y se encarga de escribir las contras, traducir, corregir e incluso de hacer fotos. Le encantan nuestras reuniones, aunque a menudo se queja de que es quien más habla… Y es cierto, padece de verborrea, pero a cambio tiene una risa de lo más contagiosa. A veces le da por dudar de sí misma y cuestionarlo todo, pero lidera nuestro pequeño equipo con empatía, responsabilidad y una visión muy clara de lo que tiene que ser el futuro de mtm.
Txell Peiró Vidal
Txell Peiró Vidal
Nuestra diseñadora gráfica oficialmente, nos hace las veces de recursos humanos y pegamento del equipo, entre tantísimas otras funciones. También aporta veinte años de experiencia en la casa, que se dice pronto, pero tiene un valor incalculable. Es una persona muy cercana y salir por la calle con ella es como ir con una famosa, esté donde esté, ¡siempre se encuentra con algún conocido! Es dulce, organizada y le pirran la naturaleza y las cosas bonitas hasta tal punto que se embelesa con las imágenes y tipografías y se le cuelan unas erratas de cuidado. Qué importa, si nos suponen unas buenas risas.
Fiona Fearon
Fiona Fearon
La última en llegar, la primera en crear. Cuando enciende la imaginación se comería el mundo. Es nuestra Rights Manager, pero también editora, rastreadora de ilustradoras, gestora de redes, revisora de contratos y lo que se tercie. Es la calma personificada, piensa antes de hablar y cuando lo hace, desaparece del mundo, mejor no decirle nada. Ama a los animales (de verdad, más que nadie que conozcas) y vive con un gato y cinco pájaros sueltos por casa que se le comen el teclado. La memoria le juega malas pasadas a menudo, pero se lo perdonamos porque nos compensa con creces.